Cuando contemplo las colecciones de «Les enfants de l’eden» tengo la sensación de estar viendo un proyecto de arquitectura. Si, cada pliegue, cada caída de sus vestidos tienen un estudio y un porqué.
Son esculturas en movimiento.
Una colección elaborada de principio a fin con una filosofía propia, su concepto dirty chic nos ha enganchado.
Hortensia Maeso, vanguardia y ternura en nuestras colecciones de comunión 2015.